viernes, 27 de febrero de 2009

A 12 horas y 24 minutos...


Luego de una trácala de una pinche señora imbécil estafadora gorda güera artificial y pendeja natural (desde ese día creo que nunca había deseado su mal), estoy a 12 horas y 24 minutos de ser víctima del fraude una vez más o bien, de firmar algún papel que me ate a habitar algún espacio durante un año...

Es cierto, no dejo de pensar que volveré a caer en la trampa de algún granuja y lo peor, ahora con más del doble de dinero de lo que le di a la mal parida esa; luego pienso que sería demasiado, dos a la misma persona en menos de 2 meses pues sí es mucho, después pienso en todas las medidas que puedo seguir para darle en la madre al 'jefe cejas' como le nombró mi madre...

No sé! tengo tantas cosas en la cabeza, muchas emociones revueltas, muchas ideas viviendo en un espacio de 1 x 1, muchos sentimientos chocando entre sí... sin duda, estoy emocionada y mucho. No sé bien a bien qué es lo que vaya a pasar en 12 horas y algunos minutos...

El lugar del encuentro es en Doctor Carmona y Valle, en un tal edificio 'Leo' a una cuadra de Cuauhtémoc y frente a un parque, así fueron las especificaciones que el 'jefe cejas' me dio... Aunque en la tarde traté de ver en dónde era exactamente, mi mente era invadida por otro tipo de pensamientos y ansiedades que no me dejaron concentrarme para ver el mapa... Confío en que mi madre sepa llegar.

Sin uñas, con antojo de una manzana con chile y limón y una bola de pelos de gato en la cabeza, espero ansiosa las 12 horas y los 24 minutos...

La pregunta del fraude: ¿Me volverán a defraudar?

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