lunes, 23 de marzo de 2009

Así terminó...


Los ojos están muy pesados, el cuerpo agotado, los músculos relajados, la pijama puesta y el cabello enredado... los zapatos botados, tiro al blanco tirado, la alarma encendida y nada de ganas de tender lo destendido... los pies doblados debajo de mis cómplices nocturos, la panza medio vacía, la mente dispersa, la guía recibida y la grabadora sin pilas... el manito triste, y yo contando las horas de sueño, buscando la parte fría de las sábanas naranjas y no pudiendo dejar de respirar, de oler, de estar... con la luz apagada, los ruidos dormidos, los sueños despiertos, los recuerdos vividos, el taxi pagado, la llamada fue hecha, el mensaje está enviado y otro atorado en el buzón de salida... el bostezo en el centro de la pista, la ansiedad toma la delantera, la felicidad hizo check out y en un carro blanco se la llevó... el primer recibo de luz en la escalera, olor de cena ajena, la puerta cerrada, la bolsa de superama encima de los libros rejega por abrirse, un espejo encima de Graham con un reflejo en el espejo...

Los ojos están muy pesados, el cuerpo agotado, los músculos relajados, la pijama puesta, el cabello enredado y yo de testigo presencial de todo...





La pregunta terminada: ¿Por qué tengo tanta hambre?

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Los ojos bien abierto, el cuerpo alerta, los musculos contraídos, enfundado en un traje de baño... el futton hecho cama, la colcha hecha bola... todo lo visible en aparente orden, lo invisible es una vorágine que revuelve todo e invita a la perdición... la panza desapareciendo, la mente divagando... sin telefono ni gente a la cual llamar cuando a uno lo ataca la soledad, no le queda más que pasar saliva, sentir el nudo en la garganta y evitar que las lágrimas salgan y hablen de la vulnerabilidad... color de piel cambiando, ardor en el empeine a causa de un jamón que no quiso ser cocinado y brinco del aceite hirviendo para encontrar un buen aterrizaje...pasa de medio día, mi tour por la playa se va disolviendo entre flojera, desidia y parsimonia... Los ojos bien abiertos... intentando encontrar un testigo mudo aparte de mí.
La pregunta pesada: "por qué me arde la mano si el jamón aterrizó en mi pie?

julieTita dijo...

¿en serio quiere que le conteste por qué creo que le arde la mano? jajajaja